Iapos en Crisis: Sus Afiliados Reclaman Reintegros por Más de un Millón de Pesos

La decisión de anestesistas de cobrar a afiliados ha generado un aluvión de facturas que desborda al sistema de salud provincial. La obra social provincial Iapos enfrenta una situación crítica tras la decisión de anestesistas rosarinos de exigir a los afiliados el pago de sus honorarios, lo que ha llevado a la presentación de cerca de 100 solicitudes de reintegro, algunas de las cuales superan el millón de pesos. Hasta el jueves, se habían registrado 95 pedidos, con un monto promedio de 440 mil pesos por factura.

Contexto del Conflicto

La problemática surgió hace dos semanas en Rosario, donde los anestesistas comenzaron a cobrar directamente a los pacientes, obligándolos a solicitar el reintegro posteriormente. Esta situación ha generado un descontento generalizado entre los afiliados, quienes se ven forzados a pagar de su bolsillo por servicios que deberían estar cubiertos por la obra social.

Bruno Lomónaco, presidente de la Asociación Rosarina de Anestesia, Analgesia y Reanimación (ARA), justificó los altos costos argumentando que los procedimientos más complejos, como cirugías cardiovasculares o trasplantes, requieren honorarios más elevados. Sin embargo, esta justificación no ha calmado la preocupación de los afiliados ni del gobierno provincial.

Reacción del Gobierno Provincial

El ministro de Economía, Pablo Olivares, expresó su “profunda preocupación” por la situación, señalando que los anestesistas son parte integral de los recursos humanos de los sanatorios y que Iapos no tiene un contrato directo con ellos. “Lo que estamos viendo es un síntoma de que algunos recursos humanos han salido de control de sus patrones”, advirtió.

Olivares enfatizó que los afiliados no deberían tener que pagar por servicios que ya están siendo financiados por Iapos. Además, aseguró que cualquier monto que los afiliados se vean obligados a abonar será reintegrado y debitado de la gerenciadora correspondiente.

Presiones en el Sistema de Salud

El conflicto también ha puesto de manifiesto una cartelización en el sector, donde los anestesiólogos han limitado la oferta de servicios y han establecido acuerdos que restringen la competencia. Esto ha llevado a un incremento de más del 500% en los aranceles de los sanatorios en el último año, lo que agrava aún más la situación financiera de los afiliados.

El ministro Olivares anunció que Iapos seguirá de cerca esta situación y que, si se configura alguna tipificación penal, la obra social será querellante. “Es fundamental que los afiliados se sientan seguros y que se tomen medidas para proteger sus derechos”, afirmó.

Posible Solución y Futuro del Sistema

Ante la creciente tensión, Lomónaco intentó suavizar el conflicto, señalando que existe un atraso en el cobro de aranceles desde febrero y que confía en que se pueda encontrar una solución. Sin embargo, la situación actual ha dejado al sistema de salud de las obras sociales en un estado de descontrol, lo que requiere una atención urgente.

La crisis en Iapos refleja un problema más amplio en el sistema de salud provincial, donde la falta de regulación y control ha llevado a una situación insostenible para los afiliados. La comunidad espera que las autoridades tomen medidas efectivas para restaurar el orden y garantizar el acceso a la atención médica sin costos adicionales.

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