Santa Fe lanza un programa de pan a bajo costo para enfrentar la crisis económica.
Las panaderías de la ciudad se suman al Acuerdo Santa Fe, ofreciendo un pan diferenciado a un precio accesible para los ciudadanos..
Este martes, las panaderías de Santa Fe darán un paso significativo para aliviar la carga económica de los ciudadanos al presentar el “Acuerdo Santa Fe”, un programa que permitirá ofrecer un pan a un precio reducido. Marcos Carignano, vicepresidente del Centro de Industriales Panaderos de Santa Fe, confirmó la iniciativa en el programa “Pasan Cosas”, destacando la necesidad de adaptarse a la difícil situación que atraviesa el sector.
La propuesta consiste en vender un pan diferenciado de cinco piezas con un precio de $1.800 por kilogramo, lo que representa una reducción considerable en comparación con el costo actual del pan francés, que se encuentra en torno a los $2.200, y las especialidades que rondan los $2.600. Carignano subrayó que este esfuerzo busca no solo ayudar a los consumidores, sino también a los panaderos que enfrentan una caída en las ventas y el impacto de los constantes aumentos de precios.
El vicepresidente del Centro de Industriales Panaderos explicó que, aunque el sector está sufriendo, la llegada del invierno ha sido un alivio, ya que esta temporada es tradicionalmente más fuerte para la panadería. “El sector panadero vive lo que vive cualquier ciudadano: los aumentos, la caída de ventas, pero lo bueno es que este año vino con un invierno bastante fresquito”, comentó Carignano, resaltando la importancia de esta época del año para el negocio.
El Acuerdo Santa Fe no solo representa un esfuerzo colectivo del sector panadero, sino que también permitirá a cada panadería implementar promociones especiales o características particulares que puedan atraer a más clientes. Esta iniciativa se alinea con un plan similar que ya se había implementado en Rosario, buscando replicar su éxito en la capital provincial.
Con esta medida, las panaderías de Santa Fe esperan no solo mejorar su situación económica, sino también ofrecer a la comunidad una opción más accesible para un alimento básico como el pan, reafirmando su compromiso con la calidad y el bienestar de los ciudadanos.