“¡No damos más!” Un grito desesperado desde el Cullen

A esta altura no es ninguna novedad: El Hospital Cullen, principal efector de salud de la capital santafesina, está desbordado. Sus profesionales y su destacada infraestructura vienen haciendo lo mejor posible para combatir el COVID-19, desde hace más de un año. Pero, a veces, la humanidad se desgasta, y los médicos y enfermeros lanzan un grito desde el más puro instinto de supervivencia: “No damos más!”, expresaron en sus redes sociales.

La publicación de la fanpage de la comunidad del Cullen muestra un espacio que, originalmente, es la Sala de Observación en la Guardia Central. Hoy, con un sistema más que saturado, funciona como una de las 10 Unidades que el Hospital preparó como espacios para Terapia Covid.

Esto también es sabido: los incontrolables festejos del fin de semana pasado fueron muy inoportunos, en términos de calendario, ya que llegaron cuando el pico máximo de contagios todavía se esperaba para fines de este mes.

Es lógico, comprensible, y despierta, ojalá, empatía, el grito desesperado de la gente del Cullen. Sería bueno que lo escuchemos todos, y podamos darles una mano para que este suplicio pase lo antes posible.